10 días...

 Domingo 7 de Octubre, 8:15 a.m. acompañado de Mamen y Suso, hay días que deberías no levantarte.

Mamen, por La Morra del Pino.

Pues si, normalmente bajamos como locos, el cuchillo entre los dientes, como los piratas cuando iban a abordar en plena noche el barco enemigo, con la adrenalina corriendo por nuestro torrente sanguíneo, subiendo las pulsaciones, dilatando los conductos del aire, aumentando la percepción y manteniendonos alerta...
Pero ese día , en ese momento, no corría.....ANDABA, fue un resbalón de lo mas tonto, iba relajado y todo pasó tan rápido que aun no lo tengo muy claro, al apoyar el pie izquierdo fue como si pisara un trozo de hielo.

Cuando bajas rápido, corriendo, tus pies no pisan del todo, no se fijan en nada, solo es un apoyo rápido, buscando y esperando el apoyo del otro pie para seguir bajando, pones y quitas el pie tan rápido que no te da tiempo a resbalar, a veces resbalas, pero la velocidad hace que en el mismo instante en el que lo haces, tu pie ya no esté en el suelo, ademas la postura con el centro de gravedad un poco hacía delante y la velocidad a la que vas, hacen que no puedas caerte de culo.... aunque si de cabeza.

Seguro que muchas veces, bajando vosotros mismos o viendo bajar a alguien, escucháis el derrape de un pie, pero si esa persona va rápido no cae, solo es un UYYYYYYYYY!!!!!!!

                                           AQUI SE VE COMO BAJAR BIEN Y RÁPIDO


Bueno, a lo que iba, resbalón tonto por ir andando, instintivamente el brazo se echa hacía atrás e intenta parar la caída con tan mala suerte que los dedos no encuentran una posición "estable" para apoyar y todo el peso recae sobre el corazón y el anular.

El dedo no está muy derecho.

                                    
Viendo que los dedos no pintaban bien, Suso se acercó a por el coche a Tentegorra , en un sprint montañil y Mamen y yo bajamos hasta la Venta Ramirez a esperar que llegase...

Aquí pasé un rato malo. Se nota por el color de la cara...

Ya en nuestro coche, decidimos ir a ver a Antonio, en principio suponía que tenía una luxación pero no era así, después de reconocerme Antonio, fuimos a urgencias y la radiografía corroboró su diagnostico.

FRACTURA OBLICUA DIAFISARIA DE 3º Y DEL CUELLO DEL 4º METACARPIANO, (eso es lo que pone en el papel).

Así que esta historia termina en que el lunes por la tarde, como no había manera de poner los dedos en su sitio debido a que la desviación era muy grande, sobre todo en el dedo corazón, me han intervenido para ponerlo todo bien y me han regalado un tornillo , una férula, un cabestrillo y unos días de reposo.

Gracias Suso por la carrera que te diste al coche.
Gracias Antonio por acompañarme y echarme una mano en todo .
Gracias Inma por curarme.
Gracias Mamen por tu paciencia y por cuidarme.
y gracias a los que me dais ánimos todos los días, pronto volveré....




El vídeo es de Javi y el que baja es Angel Mayor, lo cogí prestado...gracias a vosotros tambien.